Con más de media plaza se han lidiado toros de San Martín, flojos y manejables para los toreros. Enrique Ponce, ovación tras aviso y silencio Miguel Abellán, vuelta y oreja Antón Cortés, oreja y ovación. Ponce no ha pasado buen rato con su segundo enemigo y tampoco ha brillado a gran altura en su primero. Miguel Abellán ha tenido una labor muy entregada toda la tarde y de ahí los premios conseguidos. Lo mejor se su labor en el gran toro quinto. Antón Cortés ha dejado constancia de su plasticidad y toreo gitano en su primero y en su segundo ha fallado con la espada lo que hubiera supuesto otro trofeo. |