La afición tlaxcalteca no respondió al llamado a la última de feria el pasado sábado 6 de noviembre, cuando se lidiaron ocho novillos de El Grullo y uno de Jorge de Haro.

El rejoneaodor Eduardo Cuevas enfrentó a un astado resabiado, malo, que no embestía hasta tener seguro al caballo, se iba por delante y en dos ocasiones apretó para lastimar a dos caballos de la cuadra del torero Cuevas. Cabe destacar la actuación del cabo Juan Pablo Cortés quien quedándose solo en la cara del toro, en el primer intento logró la pega del astado saliendo al tercio a recibir la ovación unánime; el tercero en fila de los forcados resultó con fractura múltiple en la clavícula.

A Hilda Tenorio, le correspondió Tortolito con 377 kilos. Malo el novillo, pasaba por derecho y se colaba por el izquierdo. Fue bien al caballo con tres puyazos. Tres pinchazos y estocada en buen sitio. Un aviso. Con su segundo, que pesó 400 kilos, lo recibió con verónicas, y fue bien al caballo, recibiendo la el segundo puyazo por Efrén El Loco Acosta, pero el novillo se vino abajo, y aun complicado, Hilda lo metió en la lidia. Una estocada en buen sitio pero transversal, varios pinchazos después fue un calvario, para que le tocaran el tercer aviso.

Elizabeth Moreno, falta de poder en sus dos novillos, aún el primero que saliendo bravo, y con castigo severo en vara, no cuajó nada, ni con Clarin de 350 kilos, siendo su segundo, pudo sacar algo de lo que el descastado animal podía traer.

Fermin Rivera, lidió en primer lugar a Urraco de 438 kilos, fino, negro bragado, toro bonito con presencia, con técnica y conocimiento de lidia, fue bien al caballo y el toro bravo repitiendo pudo destacar en la muleta, pero después de 5 pinchazos, media estocada y una completa en buen sitio pudo doblar arrancando la ovación del tendido. Lechuzo con 382 kilos fue su segundo, que siendo pronto fue bien a los 2 puyazos, y en muleta mejor por el derecho qeu por el izquierdo. El torero en ambos toros pudo demostrar su amplio entrenamiento en campo asi como el conocimiento de la lida y escuela que trae consigo.

Claudio Montiel. Chupamirto fue el primer bovino con 380 kilosm que el torero tlaxcalteca lidió, y a pesar de su pequeña estatura le hizo frente con valentía a sus dos astados. El primero bravo fue bien al caballo y repitió en la muleta y pudo al final arrancar la ovación del respetable. Nahuasblancas con 470 kilos, un jabonero con presencia y trapio el más grande del encierro fue labor heroíca que tuvo el torero lidiarlo que al ponerle las banderillas en dos ocasiones corrió con suerte al librarse que el astad hiciera de él en el piso. Aunque falto de técnica con la muleta, pudo matar al astado en el primer intento lo que hizo que el respetable pidiera la oreja, y el juez a petición mayoritaria la dió.

Novillada de 4 horas aproximadamente con menos de media plaza en tarde soleada y sin viento, ideal para una tarde toros, la afición no respondió como se hubiera deseado con este cartel rematado.