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Victorino Martín. Los toros buenos, tres magníficos, los tres primeros, siempre teniendo en cuenta el peligro que tiene la ganadería. El resto han sido zapatilleros y ponían en apuros a los matadores. Cárdenos, parejos en peso y muy bien armados, aunque sin exceso. La plaza llena hasta la bandera, nubes y claros y tarde calurosa. El Cid dos orejas y una oreja, toreo de espectáculo. En el primero, noble, ha bordando el toreo al natural y con la derecha ha estado muy bien. Frente a un Victorino que no ha desarrollado demasiado peligro pero que había que saberlo torear. Al entrar a matar le ha perseguido el toro y le ha roto la taleguilla en la zona trasera haciéndole un pequeño rasguño. Ha matado de una estocada entera y ha rodado sin puntilla. El segundo ha sido zapatillero, mas del estilo de la casa y le ha puesto en serios apuros en las dos manos. Ha estado estoico ante el peligro, dominando en todo momento con su temple al toro. Otra estocada entera, algo desprendida, y el toro ha caído sin puntilla. Una oreja. A Uceda se le ha visto desganado. En todo momento por debajo del toro. Ha tenido detalles en el toreo a la verónica con el primero y ha cobrado dos magníficas estocadas en ambos toros. Se le ha despedido con palmas. Vilches en el primero ha estado elegante toreando a la verónica en los pases de recibo y ha dado un par de naturales magníficos. Mas no ha podido después con la raza del toro, le enganchaba mucho la muleta. Estos toros aprenden muy rápido si no se les trata adecuadamente. El segundo ha sido un toro complicado y ha dejado ver la poca experiencia que con este ganado tiene el torero. Ha desarrollado sentido y el matador ha estado en peligro, hasta que ha dado muerte al toro. Estocada en el primero y estocada escupida en el segundo, ha intentado después descabellar sin conseguirlo y ha vuelto a por el estoque. Al final el toro ha rodado de una estocada.
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