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Curro Díaz |
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entrevista
de Pla Ventura |
[
17/08/2015 ] |
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CURRO DÍAZ: Creí estar soñando ante el toro de Miura |
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Con estas palabras, “creí estar soñando” describía su faena al toro de Miura el pasado 15 de agosto en Villarrobledo. Una definición que lo dice todo en su honor. Como todos sabemos, el arte suele ser caprichoso y surge cuando menos lo esperas, o quizás siempre se está esperando, vaya usted a saber. Pero lo realmente cierto es que el toro tiene mucho que ver con todo ello. La pregunta es siempre obligada: ¿Cuando surge el arte es culpa del toro o del torero? Yo diría que de la conjunción de ambos.
Y en esa conjunción referida se encontraron Curro Díaz y un toro de Miura el pasado 15 de agosto en Villarrobledo, todo un sueño para el diestro pero que, como pudimos ver, era toda una realidad. Curro Díaz dejó claro en dicho pueblo manchego que, para crear arte no te pide nadie que seas figura del toreo; para tal menester se pide tener alma de artista, muñecas rotas para la creatividad y un corazón generoso para sentirlo y, sin duda, para que vibren los aficionados con la obra creada, en este caso, todo un monumento al arte por obra y gracia del diestro de Linares.
Curro Díaz con muchas razones para sonreir -Cuando todos creíamos que te estaban apartando de los ruedos, siempre por intereses asquerosos de los despachos, de nuevo, surge el arte en tus manos y dejas cavilando a todo el mundo, la prueba, ese toro de Miura del que hemos citado en Villarrobledo. Nos han contado maravillas, Curro, dinos tú si en realidad aquello fue como nos han dicho que, tras lo leído, cualquiera queda cautivado para siempre. Nuestro corresponsal, José Luís Bautista, nos decía que ya tiene una faena inolvidable para contarles a sus nietos el día que los tenga.
Lo vi en el acto; me gustó hasta de salida y, muy pronto comprendí que si no cambiaba su comportamiento, la faena podía ser de escándalo y así sucedió. Me sentí en la gloria. Puede que, ante todo, mi capacidad de sugestión no me permitió amilanarme por aquello de que mataba una corrida de Miura; me sentí tan torero como siempre y, esa mentalidad, posiblemente, fue la que me condujo al éxito.
-O sea que, toreaste como los toreros sueñan.
Quizás tengas razón, que ese tipo de toreo que suelo practicar, la gracia que Dios me ha dado, sea el sueño de todos, incluida mi humilde persona. Me sentí feliz, dichoso, el más afortunado de los mortales porque estaba haciendo lo que muchas veces soñé y, para colmo, a un toro de Miura. Sí, sentí que estaba soñando mientras esculpía aquella faena, pero cuando arrastraron el toro y vi que tenía en mis manos las orejas y el rabo, me sentí el más dichoso de los mortales.
Con nueva imagen se presentó en Villarrobledo. Foto: villarrobledodiario.com -Tras todo lo leído, lo que me estás contando, ¿podemos afirmar que ya estás preparado para matar todas las corridas de Miura?
Cuidado que yo no quiero quitarle el pan a nadie. Al margen de que los toros de Miura, últimamente, están dando un comportamiento nada usual en la ganadería, comprenderás que yo no tengo alma de gladiador como para enfrentarme un día sí y otro también a esta divisa que, para mi suerte, por ser el primer toro de Miura que maté, me encontré con un colaborar de lujo. Es más, los toreros denominados artistas, y yo lo soy porque así siempre me lo ha reconocido la afición y la crítica, ese tipo de gestos debemos de hacerlo como algo importante; si me apuntara a esa camada, con todos mis respetos para todo el mundo, como antes te decía, sería quitarles el pan a muchos compañeros y eso no lo haré nunca.
-Entonces, maestro, ¿qué habría de suceder para que de nuevo mataras los Miura?
Sencillamente, que algún empresario apostara fuerte y montara una corrida muy especial, con caracteres de acontecimiento y, de ese modo, no lo dudaría jamás. Por ejemplo, en cualquier plaza, un mano a mano con Morante con toros de Miura, imagina qué atractivo más bello para darle categoría auténtica a un festejo.
El color rosa le inspira al torear; aquí media verónica. Foto: Argos -Este año, Curro, por lo que veo, es el año de las puñaladas traperas para tu persona por parte del empresariado. Imagina que han prescindido de ti hasta en Linares, tu pueblo; pero no por el hecho de ser tu pueblo, porque en dicha plaza has esculpido faenas memorables, entre ellas una tarde que toreaste con José Tomás que, mira que se lo pusiste difícil al ‘genio’ ¿verdad?
A veces, los planteamientos empresariales no los entienden ni sus propios organizadores. Que el 28 de agosto, la fecha inolvidable para Linares por las connotaciones de dicho día se organice una novillada económica, eso suena ridículo. Se ha montado una sola corrida de toros y, era muy difícil mi participación, lo comprendo, aunque no lo comparta.
-Año difícil el tuyo; un ciclo para olvidar y, lo que no llego a comprender es cómo no te has derrumbado por completo. No toreaste en Sevilla, no te contrataron para la feria de Madrid. Argumentos todos para derrumbarse hasta el más fuerte del escalafón, porque, fíjate, entiendo que muchos toreros puedan quedarse fuera de la feria de Madrid, pero en tu caso que saliste por la puerta grande de Las Ventas, que allí has esculpido faenas de recuerdo, nadie lo puede comprender el motivo de tu ausencia.
Yo diría que es una falta de sensibilidad empresarial pero, imagina, esas cosas logran que me venga arriba, que no desfallezca. Y no lo hago porque pese a tantas ingratitudes o cornadas de despacho, me queda la dicha de saberme torero y de esa convicción sí que no me apea nadie. Es más, como quiera que yo soy una persona muy agradecida para con la vida, superando aquella horrible lesión de Sevilla, ver que pude volver a la vida, a la normalidad para seguir siendo torero, aquella vicisitud me ayudó muchísimo para afrontar cualquier problema en la vida y, sin duda, en mi profesión.
Un natural de su paso por Madrid este año -Tienes razón, maestro, pero deberás de convenir conmigo, como ante todos los aficionados que lo que contigo se hace tiene nombre: UNA TREMENDA INJUSTICIA.
Es cierto que, los toreros siempre aspiramos a más, en realidad, hasta lo más alto; nadie está aquí para cubrir el expediente; unos llegarán más altos que otros pero, por favor, digamos que se trata de un olvido empresarial; calificar mi caso de injusticia me suena como muy lacónico y dramático. Para mí, la auténtica injusticia radica en el ser humano; es decir, en esos millones de niños que mueren de hambre cada día por el mundo, esas personas que les han desahuciado de su casa, esos hombres y mujeres que no tienen trabajo y, muchos, ni la remota posibilidad de encontrarlo. Eso sí son injusticias de verdad. Yo soy, como ser humano, un privilegiado en todos los órdenes; que quizás mañana me irá un poco mejor en la función de mi arte, pero mi persona dista mucho de todos los problemas e injusticias que hemos comentado.
-Como fuere, maestro, tú eres un caso muy especial en el toreo; yo te lo explico. Los aficionados, en tardes como la citada de Miura o la del día después en Cantalejo, son capaces de “beatificarte” mientras que, los empresarios, de olvidarte.
Tampoco todos, hombre. Lo digo porque a este paso terminaré la temporada alrededor de veinticinco tardes que, sin haber pasado por las ferias de Sevilla y Madrid, es todo un hito.
Remontándonos a 2013 vemos este remate en San Isidro -He visto que Francia ha sido para ti como una esperanza que se ha convertido en realidad puesto que, en el país vecino has toreado bastantes tardes.
He sido reclamado en muchos pueblos y ciudades del país galo, algo que me llena de alegría. Allí me consideran muchísimo; es cierto que nunca les defraudé, pero sí, se acuerdan mucho del torero de Linares, algo que les agradezco muchísimo.
-¿Eres consciente del eco que ha tenido tu triunfo ante el toro de Miura? Lo digo en el sentido de que, ¿te imaginas que te salga ese toro en Madrid, Sevilla, Bilbao…?
Hubiera sido como tocar el cielo con mis manos; pero todo eso ya tiene mucho que ver con la suerte; es decir, lo que yo hice, hecho queda, algo que hubiera llevado a cabo en cualquier plaza; el problema es que un toro así de colaborador salga en una plaza de gran repercusión y en alguna feria importante; pero eso no está en mi mano, eso sí es patrimonio exclusivo de la suerte.
De este modo, podemos afirmar que Curro Díaz sigue pisando fuerte -Con la mano en el corazón, ¿no te entra morriña o desencanto al no verte en las grandes ferias siendo un torero artista por los cuatro “costados”?
Uno se acostumbra a todo; hasta las ausencias en plazas que he triunfado muchas veces y que no debería de faltar; pero esas situaciones hacen que me venga arriba como antes decíamos; a mí solo me podrá quitar de mi profesión el toro o Dios, los demás, nadie. Y digo que nadie porque me sobran fuerzas para combatir con todos y contra todos. Me lo están poniendo mucho más difícil que a otros, nada es más cierto, pero es ahí cuando se comprueba la grandeza de un individuo; para lo sencillo valemos todos; lo difícil es lo importante.
-Estamos viviendo, Curro Díaz, un año muy complicado al respecto de la política. Imagina esas corrientes devastadoras que han desatado algunos políticos de pacotilla que su única función o aspiración no es otra que atentar contra la fiesta de los toros. ¿Qué piensas al respecto?
Que hemos caído en malas manos; esas gentes que no tienen sensibilidad para con el arte, con el propio ser humano como tal y que su única función no es otra que PROHIBIR la libertad, con eso está todo dicho. No hace falta que les califiquemos de otro modo. Esos grupos minúsculos de califican solos; dudo que, en lo sucesivo, tengan apoyo alguno por parte de los electores; de los aficionados a los toros, seguro que ninguno, no me cabe duda alguna. La mala actitud, por deplorable en lo que representa por parte de estos políticos, veámosla como una anécdota que podremos remediar en muy poco espacio de tiempo. Como te decía, la palabra prohibir me asusta, pero si lo que se prohíbe es la libertad, el drama no puede ser mayor.
-Gracias Curro Díaz. Tu actitud como ser humano es digno de elogio, lo dicen tus hechos, tus palabras, tu convencimiento ante las cosas importantes de la vida; tu calidad como torero, como artista, nos sigue llenando el corazón a cuantos suspiramos por el arte. Que tengas muchos éxitos, no desfallezcas jamás que, algún día, Dios quiera que sea pronto, el gran gentío, las grandes empresas, sean capaces de secundarnos para que, todos juntos, ante tu persona, exclamemos lo mismo. ¡Viva el arte!
Fotos 4, 5 y 6 de Muriel Feiner
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