LOS CUÉS, Querétaro.- El entusiasta y talentoso joven ganadero, Pedro Garfias, es el tercer hijo del inolvidable criador de toros bravos mexicano, don Javier Garfias de los Santos, y si bien en sus hermanos existe cierta inclinación por la crianza del toro bravo, es en Pedro con quien la semilla en verdad germina de forma por demás esplendorosa, y comienza a sustentar en él, a un ganadero de importante nivel que sin lugar a dudas, dará brillo, grandeza, dignidad y continuación no sólo a su emblemática ganadería, sino a la propia Cabaña Brava Mexicana. Sí mucho tuvieron que ver esas sui géneris convivencias entre Pedro y don Javier, su añorado padre, quien, seguramente, siempre estuvo consciente de que él –Pedro- era el más sólido prospecto para seguir sus pasos y consolidar su herencia.
Pedro Garfias, consciente del reto
Y seguros estamos también que no se equivocó, y ahora con el invaluable apoyo de su amada esposa Marysol y sus tres hemosas hijas, continúa haciendo realidad tan importante reto.
Pero… ¿cómo nace la ganadería de don Javier Garfias?, dejemos que el propio Pedro nos explique, ya que nos hemos apersonado en la hermosa e imponente Hacienda de Los Cués, situada a unos kilómetros de la ciudad de Querétaro, y en donde sienta sus reales la ganadería de Garfias.
“Mi padre -comienza con una emoción y nostalgia que se le advierte a Pedro- fundó su ganadería en 1948, y por ello adquiere veinticinco vacas de Santo Domingo y un semental de Torrecilla, agregando en ese mismo año ochenta y dos vacas de Torrecilla y entre 1948 y 1955, 8 sementales de la misma procedencia. En la actualidad la ganadería se quedo solo con vacas procedencia Torrecilla y San Mateo”.
¡Vaya cartel!, don Javier con Antoñete, Manolo Vázquez y Calesero
- Interrumpimos a Pedro, con el fin de manifestarle, que es justo en la llamada Época de Oro del toreo mexicano, cuando don Javier comienza su importante aventura ganadera:
“Sí, efectivamente su gloriosa historia comienza a la par de la evolución del toreo en México, como entorno tiene la llamada época de oro… que se viva gracias a la magia de toreros de la talla de Garza, Silverio, El Soldado, Procuna, Manolete, en fin, se me escapan tantos nombres de toreros que han dado lustre a nuestra maravillosa Fiesta… y, sí, justo en ese momento, entre los años 1953 y 1965, resultan fundamentales para el desarrollo y consolidación de la ganadería, ya que papá adquirió veinte vacas puras y varios sementales de San Mateo, entre ellos, el famoso Marranillas, hijo del toro más caro de la historia de México… el toro 10 de San Mateo”.
- Ahí comenzó la historia de Garfias, como ganadería, Pedro, pero… ¿como inicia su andar en los ruedos?
“Mi padre decide que es momento de presentarse, y esto ocurre en Torreón, Coahuila, el 15 de febrero de 1953, con seis toros para Fermín Rivera, Carlos Vera Cañitas y Rafael Llorente; y ya en la Monumental Plaza de Toros México, hace su debut el 14 de septiembre de 1958, con seis novillos para Heriberto Quintero, Mariano Rodríguez y Jesús Peralta. Seleccionando su primera corrida para ser lidiada en el coso titular de México el 3 de enero de 1965, el cartel lo dice todo: Joselito Huerta, Jaime Rangel y el español Victoriano Valencia, quien por cierto es suegro de Enrique Ponce.
“Innumerables tardes de gloria tuvo mi padre en la Plaza México, como por ejemplo la del 30 de enero de 1972, en la que Manolo Martínez le cortó el rabo a Gladiador y Palomo Linares le cortó el rabo también a Tenorio; o bien, el 7 de enero del 1973, Curro Rivera le cortó las dos orejas y rabo a Horchatito luego de un estoconazo recibiendo, es una faena que se quedó en el recuerdo de toda la afición.
“Pero no todo queda ahí, Pedro Gutiérrez Moya El Niño de la Capea, tras excelsa faena, le cortó el rabo al extraordinario Corvas Dulces, un faenón de antología; y también está en el gran historial de la ganadería, aquel 11 de enero de 1976, cuando Eloy Cavazos le cortó el rabo a Vidriero. Igualmente en el recuerdo se viene a la memoria la faena de Marcos Ortega al extraordinario Boca Seca, que se acabó indultando el 17 de febrero de 1980, tras mostrar la encastada bravura de la sangre de Garfias.
Pedro, de pequeño, con su amado padre dando vuelta triunfal
“Son tantos y tantos recuerdos de hechos históricos en la Monumental Plaza de Toros México, que me hacen vibrar, y el recuerdo me apasiona y me hace añorar tanto a mi padre, pero al mismo tiempo ante tanto caudal de sabiduría, el reto que ahora tengo me hace crecerme más. “Mira, otra tarde de apoteosis fue el mano a mano de Eloy Cavazos y José Mari Manzanares, tras las imponentes faenas de Eloy a Curtidor y a Mesonero; así como la heroica respuesta de Manzanares con Gazpachero. Bien debes de acordarte, cuando Manolo Mejía resurgió aquella noche del 17 de octubre de 1993 gracias a Costurero”.
- Lo que se ve no se juzga, y se percibe en todo momento el indiscutible respeto y admiración que le tienes a tu señor padre.
“Así es, mi padre, en una opinión personal, fue el ganadero histórico más importante de América, a partir, como ya he relatado, desde la segunda mitad del siglo XX. Tengo una gran responsabilidad al continuar con el legado que me ha dejado. La ganadería esta en primera línea desde hace 50 años. Lo difícil es mantener los triunfos continuamente, pero estoy dispuesto a conseguirlo, porque acepté el reto consciente de ello”.
- ¿Desde que naciste la ganadería ha formado parte de tu vida?
“Te contestaré lo que alguna vez respondí a un ganadero: Tengo 39 años de ganadero ya que nací ganadero, y recuerdo de mis primeras vueltas al ruedo, a los 8 años en la Santa María de Querétaro, orgullosamente al lado de mi padre, en la tarde de Quijote con Manolo Martínez. Siempre me gustaron los toros, de hecho en 1989 estuve en España un año, en la ganadería de Alonso Moreno, cuya procedencia es Marqués del Saltillo, aprendiendo el oficio de ser ganadero. Actualmente tengo el 60% de la ganadería de Garfias, ya que compré a mis hermanos Pablo y Alonso lo que les correspondía”.
Pedro Garfias es muy exigente en la selección de su ganado
- ¿Qué características fundamentales crees que debe tener el toro de lidia?
“Mi ideal de toro es el bravo con clase. Esto te lo da la pureza de la sangre de la ganadería, que desde 1908 no se mezcla con nada. Mi padre cambio el tipo del toro de San Mateo y lo cambio a un toro con características propias por lo que nació el ENCASTE GARFIAS. Necesito un torero como Manolo Martínez para producir exclusivamente toros bravos. La ganadería que más toreó el mandón de la Fiesta -Manolo Martínez-, fue justamente Garfias. Esto porque era un torero que le gustaba primordialmente el toro bravo que repitiera y bajará la cabeza.
“Decidí tener una profesión distinta a los toros, ya que experimente lo duro e injusto que puede llegar a ser el público. Recuerdo como si fuera ayer aquel día (1987) en el Palacio de los Deportes en la Ciudad de México. Hubo un problema con la luz y los toros no respondieron como debieron”.
- Por lo tanto, Garfias es una ganadería madre.
“Efectivamente, es una ganadería madre que ha nutrido desde hace varios años de casta y bravura a muchas vacadas, al Campo Bravo Mexicano, Venezolano y Colombiano. A la ganadería Garfias, le han comprado sementales las principales dehesas de México, que incluyen San Martín, Manolo Martínez, Xajay, Pepe Garfias, Santa Bárbara, Rancho Seco, Fernando de la Mora, Reyes Huerta, El Vergel, Monteverde y un largo etcétera, para no olvidar a muchos amigos ganaderos”.
- Pedro, bien recuerdo que iban a lidiar sus toros en España, ¿qué pasó en aquel entonces?
“Hubo una campaña muy fuerte contra la ganadería Garfias, justamente cuando se pretendía lidiar una corrida de toros en la Monumental Plaza de Las Ventas de Madrid en 1992. Juan Pedro Domecq atrasó el beneplácito a mi padre de ver salir en la primera plaza del mundo a sus toros, y dar lustre y gloria al toro mexicano; por ello tuvimos que lidiar los encierros en la Monumental Plaza de Toros México y en Santa Clara. De hecho el toro Bilbaíno peso casi 700 kilos y tuvo movilidad en la plaza. Esto lo usaron gente que no le agrada que los demás triunfen, para decir que Garfias estaba fuera de tipo. Sin embargo, al siguiente año se indulto un toro en Aguascalientes por Mariano Ramos y Manolo Mejía renació con Costurero en la Plaza México.
"En el año 1997 se ganó el premio a la mejor corrida de la Temporada Grande en México. En el 2000, Pablo Hermoso cortó un rabo a Preferido. Y ya muerto mi padre y bajo mi dirección, en 2006 conquisté el premio a la mejor corrida y toro de la gran México. En 2007 lidie seis toros muy importantes en la corrida que iba a ser la despedida de El Pana, y fue justamente su reencuentro con dos toros inolvidables para El Pana y para nosotros Rey Mago y Conquistador. Por eso, me llevé también la mejor corrida y toro de México”.
Pedro Garfias y El Pana, dos triunfadores
- Se ve que los triunfos en la Monumental Plaza de Toros México, continúan ascendentes contigo.
“Tengo que agradecer públicamente al empresario, Rafael Herrerías, el apoyo que me ha brindado para estar presente en la plaza más importante de América. También le doy las gracias al Dr. Herrerías por la placa que esta en la entrada de la plaza México en la que están en dorado los rabos de la ganadería GARFIAS. Con muchas tardes como la que tuvo El Pana con mis toros, regresará sin lugar a dudas la gran afición a las plazas. Los toros de esa tarde fueron bravos, con clase, con mucha calidad, y tuvieron un peso de 550 kilos, y por supuesto, con más de cuatro años, y ahí está todo, la gente volvió a vivir intensamente la Fiesta. El Pana después de la corrida llenó varias plazas en provincia, por la expectación que da un toro bravo, y dejó como lección fundamental, para todos los jóvenes toreros, que ese es el camino que da emoción y sustento a la Fiesta: el toro con edad, casta, bravura y calidad, como los que tenemos en Garfias.
“Por mí parte, consideró que si debe haber un cambio en la legislación del Distrito Federal, con el fin de dar apoyos fiscales, y todos los que puedan con el fin de permitir llevar más gente al espectáculo, con toreros de primera línea, y apoyar a todos los jóvenes que hay ahora mismo en México que pueden ser en poco tiempo la base de nuestra Fiesta. Así la cadena de empleos se consolidará mejor, y podremos ver a nuestra querida Plaza México, nuevamente llena a reventar”.
- La historia, por fortuna te hace justicia e impulsa vigorosamente tu futuro.
“Así, es, y por eso, el año pasado con mucha ilusión lidié una corrida en Moroleón, Guanajuato, a la que le cortaron siete orejas y un rabo, y este año en San Juan del Río, Querétaro, lidié otros tres toros y les cortaron 5 orejas y un rabo. La ganadería esta en un gran momento y consideró que puedo competir con cualquier ganadería en México y España, en corridas de toros. Cada año doy la cara en la Plaza México, ya que las ganaderías de renombre tienen que refrendar su prestigio justamente en la México”.
- Y el rigor en la selección de individuos para los empadres que darán la continuación a tu ganadería sigue siendo punto fundamental.
“Estos últimos años he aprobado y toreado catorce sementales en la ganadería, con el mismo rigor que mi padre me enseñó, son toros de distintas líneas por lo que la ganadería esta abierta. Actualmente he vendido pie de simiente a varias ganaderías y entiendo que han funcionado, porque en sus triunfos se refleja”.
- Como apunte en todo este gran historial, cabe recordar que tu padre también incursionó como empresario de la Monumental Plaza de Toros México.
“Así es, mi padre como empresario logró llenar la plaza México. Esto se dio por su sensibilidad de la fiesta y por saber combinar los carteles, la publicidad y los toros escogidos de regalo. También se lleno la plaza por la inteligencia y valor de Manolo Martínez y José Chafik Hamdan Amad, que escogieron el ganado a lidiarse y que constantemente cortaron por lo menos una oreja por festejo. Manolo no tuvo miedo en repetirse domingo tras domingo en México. Tuve una gran amistad con Manolo como actualmente la tengo con José Chafik”.
- Pedro… mejor dicho, don Pedro Garfias, porque el don te lo estás ganando a pulso y con sólido fundamento, te agradezco tu disposición para permitir que los distinguidos lectores de Opinionytoros, conocieran de viva voz a un joven ganadero tan talentoso, y con una gran sensibilidad, amén de los conocimientos que, sin lugar a dudas, te sustenta como uno de los jóvenes ganaderos con un futuro por demás exitoso, fundamentalmente, porque salvaguardas la premisa primordial de la Fiesta… el auténtico toro bravo.
El toro del Encaste Garfias
“Contento estoy de poder saludar a través de Opinionytoros a tantos lectores no sólo de México, sino de España, Francia y Sudamérica, así como de todo el mundo que gustan de tan bello espectáculo como es la Fiesta Brava, y quiero que sepan que amo tanto a la Fiesta de los Toros, que por ello mismo lucho y seguiré luchando a brazo partido por su dignificación a través del TORO BRAVO, que habita en la ganadería de GARFIAS”.