Se marcha uno de los pocos, quizá el único, que ha querido y ha sabido ser diferente en todo. No le gustaban las fotocopias y ha ejercido de original. Admirado por muchos y denostado por otros, esa forma de ser y hacer en el toro no ha pasado desapercibida. Hablamos, no podía ser de otro modo, de Luis Francisco Esplá. Un torero que ha concitado la máxima atención en estos días.
Nos recibe el maestro en su casa para darnos una ajustada media y dejarnos colocados en el terreno adecuado, eso esperamos, o si procede, una larga que nos mande lejos del mejor terreno. Si algo le han reconocido todos es el conocimiento de los terrenos. De los de fuera de la plaza, también.
Como es buen conversador, y de amplias respuestas, decidimos ofrecerles esta entrevista en dos partes sucesivas. Así que agradeciéndole su tiempo para con OyT, comenzamos a preguntarle.
Esplá se mostró abierto y distendido para esta entrevista en OyT
-Siempre pensamos que Esplá se iría en silencio, sin darle publicidad a su marcha. Algo cambió de pronto y se anunció el movimiento de ir de la mano de Martínez Uranga para hacer temporada de despedida. ¿Esta temporada del adiós se hacía necesaria?
No fue cosa mía, yo quería irme como vine, un poco por la puerta de atrás y sin levantar siquiera sospecha de una retirada, pero al final uno vive dentro de un entorno, un círculo de amistades, está la familia y se debe uno a ellos y, al final, ellos han sido los que de alguna forma me han obligado a tomar esta determinación, ha sido mi entorno. Y al final yo que siempre he dicho que los éxitos y los fracasos los vivía y veía reflejados en ese entorno mío, pues también, si soy capaz de vivir los éxitos y los arrojos y recoger en ello las consecuencias de todo ello, de todos los mis avatares en el ruedo, pues evidentemente tenía una deuda para con ellos y no he tenido mas remedio que satisfacer ese deseo de despedirme a bombo y platillo.
-Luego el destino, tan caprichoso, ha jugado a favor. En las plazas por las que se pasaba a despedir, Valencia, Castellón, Sevilla... no había alegría, no había ningún lujo pese a torear ya corridas de las llamadas comerciales, pero llegó Madrid, su plaza de referencia, y todo cambió. ¿Fue un milagro o fue la consecuencia lógica de estar en el sitio adecuado?
El vestido de Madrid roto tras la salida a hombros. Lo quiere conservar tal cual
Este ha sido un año en el que bueno, de una forma revitaliza ilusiones, llevo metido en el campo desde el mes de octubre del año pasado y lo que decía Picasso debe de ser verdad, ¿no?, que las musas te pillen trabajando, es la única forma de aprovecharlo. Estaba preparado, pero los toros no habían embestido hasta ahora, en Valencia se pararon, Castellón se pararon, en Sevilla fue una corrida, bueno... sobre todo mi lote, fue mas bien duro y en Madrid a poquito que hubo oportunidad a pesar del aire, ya vino la suerte cambiada, ¿no?. Y uno esta preparado para eso y la recibe, eso es lo que ocurrió de alguna forma, estaba la ilusión, estaban las ganas, detrás estaban todos esos meses de preparación y tenía que tener ese resultado, la posibilidad de tener un toro de esas condiciones…
-¡Y en Madrid!
La felicidad le inundó en la vuelta al ruedo, con las orejas, en Madrid
Y en Madrid, y a pesar del viento, incluso el primer toro hubiera sido de orejas de no ser por ese azote de viento. Otro de los problemas de Madrid, el viento, uno no solo tiene que enfrentarse a las inclemencias y a la dureza de un público y la seriedad de ese toro sino que además muchas veces es incluso el viento el que viene ya a colofonar todo ese rosario de dificultades.
-Yo, en mi crónica de ese día, digo que se quitó la montera para brindar al público, la puso en la arena y en ella se guardó el viento. Alicante será, seguramente, otro día especial. El día grande, San Juan, un nuevo adiós de los de muchos recuerdos y vivencias. La Terreta en primera línea del corazón, ¿supongo bien?
Evidentemente, yo vivo aquí y al final es aquí donde voy a recabar y donde uno pues va a recoger todos esos frutos del recuerdo ¿No? Que han ido madurando con el tiempo y uno quiere dejar, como ha ocurrido en Madrid, ese sabor lo quiere dejar totalmente a salvo. La memoria, que es muy frágil, del ser humano y sobre todo la del aficionado, siempre recuerda los últimos acontecimientos. Aparte es necesario que esos últimos acontecimientos estén impregnados por la sustancia de Madrid.
-¿Le hubiera gustado haber cedido los trastos a su hijo Alejandro en este día?
Sí, hubiera sido lo ideal, pero también uno tiene que sustraerse a veces a la emoción y tiene que pensar con sensatez. Alejandro necesita todavía pulir algunas cosas y sería precipitarlo a un destino que todavía está por definir.
-Conoce y vive la fiesta, pero conoce y vive también todas las manifestaciones artísticas. ¿La Fiesta de los toros forma parte por derecho propio del arte?
Se rige por los mismos parámetros, la percepción del espectáculo es la misma que la de cualquier disciplina artística. Es cierto que aquí se contempla lo folclórico, se contempla lo popular, pero eso es nada mas la parte mas externa de esa cebolla que según se va pelando va conteniendo cada vez capas mas jugosas, mas densas y dentro de ese corazón está todo absolutamente lo que significa el arte. Está esa ansiada búsqueda de la calidad, esa ansiada búsqueda de la belleza, esa necesidad de encontrar en el arte una especie de artilugio, de artimaña contra la muerte. En definitiva el toreo reúne todos los ingredientes de los que requiere toda manifestación artística.
Y el espectador no se tiene que conformar con lo folclórico, ni con lo popular, tiene que hacer esa reflexión en torno a lo que ocurre como en el arte. Un espectador en definitiva ha ido a interpretar y ahí el proceso intelectual también juega su papel. Por tanto un aficionado, cuanto más ducho esté, cuanto mas trabaje su percepción en las corridas de toros, mucho mas va a disfrutar, como le ocurre a cualquier aficionado de arte.
La charla con él transcurrió con gran facilidad ya que es muy buen conversador
-Tras más de tres décadas en el mundo del toro qué es lo que más le ha satisfecho y qué lo que menos? ¿Quedó algo por hacer?
Por hacer queda absolutamente todo, los artistas tenemos ese sentido de la insatisfacción, que es necesario para poder prosperar. No se conforma, el inconformismo o el conformarte con poco, no solo va a aniquilar el criterio, sino que además aniquila las pretensiones artísticas. Por eso la insatisfacción tiene que ser una constante en el artista. Por bien que te hayan salido las cosas, tu siempre piensas que podías haberlo hecho infinitamente mejor. Sobre todo ese ideal que tienes de faena nunca puedes conciliar o materializar con el mejor de los toros. Siempre ese ideal está por encima de lo que puedas conseguir en una plaza de toros.
Y eso es lo que alimenta o es la sustancia para poder seguir creando todos los días. Lo he dicho muchas veces, el torero que crea que ha cuajado la faena de su vida, al día siguiente obligatoriamente tiene que pedir una pistola y pegarse un tiro, porque a partir de ahí la vida no va a tener sentido para él, ni artística, ni vitalmente va a tener sentido. Esto es un poco lo que buscamos todos los artistas.
Y por otro lado, lo mejor que he tenido en esta profesión ha sido mi relación con el toro, ese perpetrar el mundo, el cosmos del toro a partir de esa respuesta totalmente caótica del animal que es necesaria para incorporarla a la creación, a la faena, eso que podría desbaratar absolutamente todo y terminar dándole forma y convirtiéndole en parte de esa propuesta estética y escénica. Es el milagro y es lo que mas me ha gustado siempre en el toreo.
Qué no me gusta, pues este taurino que afortunadamente cada vez mas va despareciendo, pero cargado de vicios, cargado de clichés totalmente caducos y que además representan una España que no es la que se asoma al espectáculo. Esa España casposa, esa España decrépita llena de connotaciones políticas que en ningún caso existen en lo más íntimo del toreo.
-Se puede decir que existe equidad en el reparto de oportunidades o justicia para quienes de verdad se lo ganan en la plaza?
Normalmente sí, aunque también es verdad que la suerte no es equitativa, es la que define muchas veces la carrera de los toreros. Ese toro en el momento preciso, esa cornada a destiempo, son circunstancias que a veces no se dan, y toreros que tienen las cualidades y atesoran unas calidades excepcionales por mor de esta falta de suerte, y ahí si que la suerte es muy arbitraria, ven pasar el tren de su vida sin poderlo coger.
Pero aquí al final todo el que hace el esfuerzo, todo el que está delante del toro, arropado por esa suerte de la que hemos hablado, arropado por esos buenos mengues y es capaz de hacerlo tiene su compensación. Problema, que también como he dicho antes, la memoria de la afición es muy endeble, y eso hay que repetirlo y no se puede eludir y vivir de las rentas como ocurriría en cualquier disciplina artística. Es algo que hay que reiterar mientras estas vistiéndote de luces, y muchas veces no solo eso, iniciar una carrera de mejora, una especie de estilización de todo aquello que te lleva al final al límite de posibilidades y es ahí donde uno tiene que vivir y decir: bueno... es aquí a donde iba y ahora ya para casa.
Una imagen característica de este torero en la plaza
-Su hermano Juan Antonio, considerado un gran torero, no alcanzó la cima. Es capaz de analizar su situación?
Es difícil, posiblemente esas arbitrariedades del destino, a todas luces mi hermano decían que era el mejor, pero al final no es uno el que decide la perpetuidad en este negocio, son los espectadores, es el sistema, son muchas las historias que deciden sobre la longevidad o no de un artista. Mi hermano no ha tenido esa suerte. Motivos? pues no los se, tendría que ser él el que pudiese explicar con mas puntualidad.
-Podría entrar dentro del terreno que hemos hablado antes de la suerte?
Podría ser… esos toreros que no les ha pasado el tren en su mejor momento o no han tenido ese toro necesario en el momento clave, o han tenido ese avatar cuando menos se necesitaba.
-Ahora su hijo Alejandro se adentra en este mundo, a mi modo de ver, tan cerrado. Es consciente de que se necesita, además de cualidades, ese golpe de fortuna que impulse su carrera?
Lo de la fortuna es además de... Si no se tiene lo otro… lo que hay que hacer es apostar con fe a un número y Alejandro tiene hecha su apuesta. Ahora, el tiempo nos dirá si cuando pase su tren es capaz de cogerlo, eso es algo que desvelaremos con el tiempo.
Alejandro tiene condiciones, que las tiene que pulir, que las tiene que mejorar. Pero creo que tiene unas cualidades innatas no para comer de esto, sino para ser gente en esto. Que sepa utilizarlas, que sepa pulirlas, que sepa afinar esas herramientas es su problema. Pero, que además, en ese momento, cuando todo esté perfectamente afinado, pase el carro de la fortuna. Es también necesario.
-Le he visto y creo que Alejandro tiene cualidades como torero, pero pienso que quizá tiene que desaparecer de la escena su padre, quitar ese paraguas para que él, Alejandro, se sienta él mismo.
Por un lado Alejandro estará siempre perseguido y presidido por el apellido Esplá, no podrá huir de eso pues le será imposible, pero también es cierto que el Esplá le abre puertas pero que muy rápidamente se convierten en una celda.
Alejandro jamás ha hecho por imitarme, de hecho hasta en sus conceptos esenciales es distinto, él es de Belmonte, yo soy de José. A partir de ahí somos totalmente distintos. Tiene el concepto clásico del toreo, aunque no tiene nada que ver con su forma de torear ni con su escuela.
Salió de Alicante con sonrisa, pero por culpa de los toros no fue lo deseado
-La entrevista fue realizada días antes de la actuación en Alicante y como ya le habíamos anticipado, quisimos conocer sus sensaciones tras de su actuación de despedida en Hogueras el día de San Juan. Así se que le trasladamos la pregunta. ¿qué supuso ese día?
La decepción de no ver colmado toda una serie de pretensiones por mor del ganado, el fiasco ese. Pero bueno, por otro lado con esa ausencia de posibilidades, ha demostrado Alicante todo el cariño que es capaz de administrar.
-Cabe la posibilidad de despedirse de otra manera de esta su plaza., ¿Quizá organizando un festejo para poder dar a final de temporada la alternativa a Alejandro?
Así como el otro día no teníamos ningún anticipo, y había por ahí una serie de rumores, ahora ya parece que la empresa tiene planteado algo en torno a un futuro seguramente, pero también es un boceto muy leve. Únicamente se ha planteado algo en torno a octubre y nosotros hemos dicho que estamos abiertos, pero nada más.
-Siendo así, se podría convencer a José Tomás para que actuara de testigo y completar la terna de ese día y hacer de la alternativa todo un acontecimiento?
Eso seria lo ideal, pero no cabe anticipar nada puesto que no hay nada planteado. Únicamente que sí que me ha pedido la empresa que si estaría dispuesto a montar un cartel para dar la alternativa a Alejandro. Estamos abiertos.
En breve les ofreceremos la segunda parte de esta entrevista con nuevas y jugosas respuestas de Esplá.
Fotos: Alberto C. Sánchez y Muriel Feiner