Con la llegada del mes de marzo se puede decir que la temporada entra en ebullición. Aumenta la temperatura y no solo por la quemá de las Fallas valencianas.
Olivenza e Illescas prenden la mecha, a la que dará continuidad la feria fallera valenciana, ésta ya de largo metraje y, de inmediato, llegará la feria de la Magdalena en Castellón. Sin olvidarnos de Madrid, que abrirá sus puertas el 24 y 31 de marzo, programando dos novilladas en esos domingos finales del mes.
Cada feria provocará el interés de muchos y hasta esas localidades se desplazarán los aficionados para disfrutar de forma aislada o continuada de su afición.
Por supuesto que será el coso de la calle Xátiva el que despierte a más diferentes tipos de aficionados, ya que programa carteles donde las figuras tienen su sitio, pero también otros toreros con predicamento y que en la temporada anterior presentaron credenciales de primerísimo nivel. También en el ganado es la plaza valenciana la que ofrece cierta variedad de encastes.
De todos los nombres anunciados, será Paco Ureña el que mayor atención pueda presentar al producirse una esperada reaparición tras el grave percance sufrido el pasado año en Albacete, con la pérdida de un ojo. Es seguro que, al menos, de forma más sentimental sea el torero lorquino el que nos traslade más emotivo su nuevo paseíllo el día 16 en Valencia.
De todo lo demás, destacamos la vuelta de Victorino Martín a la feria de Fallas, la presencia de los triunfadores de Otoño en Madrid, Urdiales, de Justo, Chacón y también de Pablo Aguado. Sus actuaciones en Otoño han tenido reconocimiento y premio en Valencia. No es mala cosa que eso, los triunfos, tengan sentido.
Ahora toca eso, prepararnos para este marzo, donde casi todos los días están anunciados festejos taurinos. Una buena manera de entrar en ebullición.
Que Dios reparta suerte.
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